Buenos Aires, una ciudad muy lejos de Europa pero muy mediterránea, con una arquitectura preciosa y muchos edificios majestuosos, impresionantes, distribuidos aquí y allá entre el bullicio de la ciudad y de la gente.
Tiene barrios muy diferentes, pero todos únicos, desde La Boca con sus casas coloreadas y su gente humilde hasta el barrio de Palermo con su ambiente hipster y sus preciosos locales.
Algo muy distintivo de la ciudad es el fileteado, un arte porteño, una manera única de pintar a mano, con colores muy vivos y sobre cualquier superficie, usando simetrías y convirtiendo cualquier objeto en una obra de arte, bares, quioscos, autobuses… Esta disciplina se declaró en 2015 Patrimonio Cultural inmaterial de la Humanidad, y no nos extraña nada, se lo merece!
Algo que también me enamoro a primera vista y me imagino q lo va a seguir haciendo en cada país que visitemos, es la naturaleza, la flora y la fauna, el descubrir árboles y/o flores que no he visto en mi vida y el contemplar animales en su hábitat natural. En este sentido recomiendo visitar la Reserva ecológica Costanera Sur o simplemente sentarse bajo los árboles en cualquier parque de la ciudad.
El cartoneo es un oficio propio del país, el cartonero es la persona que se dedica a recoger cartones de locales y/o de la calle y luego los lleva a reciclar para recibir una compensación económica. Es un oficio respetable con el que la gente pobre logra sobrevivir. El problema es que a menudo los cartoneros no utilizan solo un carro para cargar el cartón sino que usan caballos, los cuales sufren mucho. Imaginaros, si esta gente apenas tiene dinero para cubrir sus necesidades como van a poder mantener a un caballo en buenas condiciones… Es una pena.
Es muy triste contemplar la pobreza que sufre una parte de la población, pobreza que a la vez es la causante de los problemas y la delincuencia.
Nosotros no hemos vivido aquí mucho tiempo (unos 10 días) pero en este tiempo no hemos visto ningún robo, ni pelea, ni altercado, ni nada, pero hay que decir que se respira un poco de inseguridad. Muchas tiendas y locales mantienen sus rejas puestas durante el día, otros negocios están cerrados con llave y hay que picar para entrar, los interfonos de los edificios no funcionan para obligar a controlar en persona quien entra en el edificio, muchas ventanas y balcones también están cerrados con rejas… Todo esto, lejos de dar sensación de seguridad, a mí personalmente me genera inseguridad y muchas preguntas… tan mal estuvieron los porteños en los últimos tiempos? Hay muchas teorías y explicaciones políticas, el peronismo, el kirchnerismo… desde mi punto de vista una lucha por el poder que no parece haber ayudado nada al pueblo.
Y sobretodo el problema con la moneda y el miedo a perderlo todo. El peso argentino se devalúa continuamente y en 2001 fue tan grave la cosa que la gente perdió de golpe la mitad de sus ahorros, eso provoco que ahora la gente ya no quiera pesos, que siempre intenten comprar dólares y ahorrar en esa moneda (ya que esta no pierde valor) o usen su dinero para invertir. También hay mucha desconfianza con los bancos y la mayoría de la gente guarda el dinero en casa, he aquí que haya tantos robos porque se sabe que la gente tiene mucha o toda su plata en casa.
Gracias y un super abrazo a Ana y Carlos que nos ayudaron a dar nuestros primeros pasos por la ciudad de Buenos Aires.
Córdoba, una ciudad mucho más “relajada” que Buenos Aires. A pesar de ser la segunda ciudad más grande de Argentina conserva algunos barrios o zonas que recuerdan mucho a un pueblo, donde todo son casitas o edificaciones bajas en vez de edificios. La mezcla arquitectónica también es muy rica y eso que luego dicen que Argentina no tiene historia! Puedes encontrar desde iglesias antiquísimas como la iglesia Catedral (1573), o como la iglesia del Sagrado Corazón o comúnmente conocida la iglesia de los padres capuchinos (1943) hasta obras modernas como el puente del Bicentenario y el área del nuevo centro cívico que ahora es sede del gobierno (2011).
El paseo de las pulgas o paseo de las artes fue una de las cosas que más me gustó, es una feria de artesanos que se celebra todos los fines de semana en el barrio Güemes, es un lugar re-lindo donde puedes pasear, observar pequeñas obras de arte hechas con objetos reciclados y / o comprar alguna cosa de segunda mano. En la zona también hay muchos bares y restaurantes muy acogedores y con buen ambiente.
Durante los días que pasamos en Córdoba también hicimos un par de excursiones. Por ejemplo fuimos al rio a refrescarnos en Alta Gracia, lugar precioso para pasar el día con amigos y beber Fernet con coca, la bebida típica del verano. Otro día fuimos a la sierra, en Unquillo, donde disfrutamos de un asado riquísimo con Maru y Martin, y de unas vistas espectaculares desde arriba del cerro Pan de azúcar.
En resumen Córdoba nos gustó mucho y sobretodo nos sentimos como en casa, pudimos descansar y empezar a relajarnos y todo gracias a Ceci y Negro que nos alojaron en su casa y compartieron sus experiencias y tradiciones con nosotros (ahora me encanta el mate! 🙂
Por último viajamos a Rio Cuarto con el objetivo de ver el rally Dakar y en el hotel donde nos alojamos conocimos a Cecilia y Oscar, un matrimonio aventurero que también quería ver el rally y muy amablemente nos llevaron con ellos hasta uno de los puntos marcados por la organización como zona de espectadores.
Madrugamos muuuucho y esperamos muuucho hasta que por fin a las 14h más o menos empezó el rally para nosotros encabezado por Joan Barreda (que hubiese sido el ganador de no haber sido penalizado). El resto de la tarde fue un no parar de motos y coches y el mejor momento del día fue, sin duda, cuando apareció el primer camión pilotado por el ruso Nicolaev y paso en frente nuestro haciéndonos vibrar de emoción.
Y hoy hemos llegado a Montevideo, Urugay y mañana vamos a recoger a Cactus!! Por fin!!! 🙂
Que interesante! Seguid escribiendo y así viajamos con vosotros, un beso
Gracias!! Seguimos trabajando para enseñaros los paises que vamos conociendo!