Hace unos días llegábamos a Piedra del Águila junto a tres mochileros, Conni, Diego and Jona, a los cuales llevamos desde Neuquén hasta aquí. Encantados de conoceros chicos y que tengan mucha suerte!
Paramos en la estación de servicio YPF e inmediatamente nos llamó la atención un camioncito que había allí aparcado, se trataba de un Steyr Pinzgauer muy bien equipado para llegar a todos los rincones del mundo! Buscamos a los dueños y cuando los encontramos nos hicieron participes de las malas noticias… la caja de cambios se había roto! Y como ya estaban al final de su viaje no iban ni a intentar arreglarlo, lo único que querían era llevarlo hasta el puerto más cercano para poder embarcarlo de vuelta a casa.
Los dueños son Hansi y Günter, un agradable matrimonio austriaco que obviamente no saben ni una palabra de español! Y que ya llevaban 4 días allí parados! Por eso decidimos quedarnos a ayudarlos, por eso y porque creemos que todos los viajeros que estamos en la carretera tenemos que ayudarnos entre nosotros.
Cuando llegamos, un policía del pueblo trataba de ayudarlos, llamó a una grúa del ACA y contrato el servicio hasta Bahía Blanca para el día siguiente por la mañana. Gracias Cristian, fue un placer conocerte y ver que aún queda gente buena!
Nosotros dormimos en un camping cercano, con los mochileros que dormían en tienda de campaña y algunos viajeros más que conocimos allí, Lisandro, un apasionado motorista, Silvina y Ángel una divertida pareja de Buenos Aires y otra pareja de motoristas de los cuales no recuerdo el nombre.
Al día siguiente nos levantamos pronto para hablar con el tipo de la grúa, que llegó, tomó los datos del vehículo y mientras se los pasaba a su empresa, ésta decidió que no podían hacer el servicio porque se trataba de un motorhome y porque tenía 3 ejes… Una tontería enorme! Y ahí empezó la aventura, Jose y Günter se dedicaron a ir a todas las empresas de grúas y/o transportes a preguntar si harían el servicio y cuanto les cobrarian, y yo me quede haciendo compañía a Hansi, que la pobre estaba harta de la situación y lo único que quería era irse a casa… La situación fue empeorando con el tiempo, creemos que la compañías de transportes hablaron entre ellas, se dieron cuenta de que eran nuestra única solución y a cada minuto que pasaba nos pedían más dinero… Ángel, el hombre de Buenos Aires que conocimos en el camping, también se unió a nosotros en la búsqueda de un transporte y empezó a preguntar a los camioneros a ver si alguno estaba dispuesto a llevarlos, pero ninguno de nosotros tubo suerte… Se hizo la hora de comer y improvisamos una pasta boloñesa que comimos todos juntos en la gasolinera a pocos metros de la carretera! 🙂 fue un poco de caos y nervios pero también fue divertido! Después nos despedimos de nuestros nuevos amigos de la ruta y nos quedamos buscando un transporte para el Pinzgauer. Aproximadamente a las 18h el milagro ocurrió, encontramos a un simpático camionero llamado Omar con ganas de ayudarnos.
El tema era ahora como cargar el camioncito encima del tráiler del camión y ahí entraba en acción Cactus!
Cactus estiró al Pinzgauer hasta el lugar donde el camionero había aparcado, justo al lado de una montañita tratando de crear una plataforma de carga… Mejor mirad el video de abajo porque es imposible de explicar!
Y finalmente ellos están sanos y salvos de camino al puerto, y pronto de camino a casa. Os deseamos lo mejor Hansi y Günter!
Me ha gustado «todos los que estamos en la carretera debemos ayudarnos».
Orgullosa deblo buena gente que sois.
Muchas gracias Teo 🙂
Cris y Jose, estoy muy contento de haberlos conocido y ayudado. Ojalá algun día nos volvamos a encontrar. Les mando un abrazo enorme
Un abrazo Cristian!!